Hace apenas 2 semanas, quedó definitivamente aprobado y firmado el II Convenio Colectivo Nacional de los Servicios de Prevención Ajenos. El acto tuvo lugar en la sede del Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo, poniendo fin definitivamente al bloqueo en el que se encontraba desde 2012.
Dicho convenio pone de manifiesto la voluntad de mejora salarial, con incrementos anuales para el 2017 y 2018, claramente por encima de algunos convenios vinculados al sector servicios. Pero, más allá del objetivo económico pactado, existe la situación específica de cada sector, en cuanto a sus condiciones de mercado laboral y comercial, aspectos que van a condicionar de forma absoluta el sentido práctico del convenio.
Respecto al mercado laboral, el sector de la prevención se va a ver condicionado por la falta de profesionales médicos especialistas en medicina del trabajo, situación que va a mover al alza el salario pactado en convenio, por lo que existen costes inflacionarios encubiertos.
En cuanto al mercado comercial, han aparecido operadores que podríamos denominar auténticos “killers”, que llevan a cabo rebajas extraordinariamente agresivas en las cuotas, poniendo claramente en peligro la calidad del servicio. Esta circunstancia tiene como resultado inmediato una disminución de valor percibido por el cliente, y, por tanto, una reducción de márgenes para las empresas del sector.
Por todo ello, será muy bien recibido, junto con el convenio, la puesta en marcha del Observatorio Sectorial, que, según manifestaciones de las organizaciones sindicales y empresariales firmantes, servirá para analizar el sector y promocionar y defender las buenas prácticas en el mismo, dignificándolo.
Aquí podéis ver el texto completo del Convenio de SPA.
